La iglesia española en la Edad Moderna
Balance historiográfico y perspectivas Los trabajos sobre historiografía incluidos en este libro son el fruto de un seminario de investigadores especializados en el estudio de la Historia de la Iglesia, celebrado en la Universidad de Granada (mayo, 2006), con el fin de propiciar una revisión historiográfica de distintos ámbitos del conocimiento de la Iglesia y la sociedad española en los siglos XVI y XVIII. En dicha reunión se ha llegado a fructíferas conclusiones, recogidas en las colaboraciones incluidas en este volumen, que suponen un balance y una actualización de la historiografía sobre el tema, lo que sin duda alguna será un estímulo y una base tanto para la investigación como para la docencia universitaria, dado el rigor científico junto a la novedad de los planteamientos e interpretaciones aquí desarrollados, imprescindibles para el conocimiento de aquellos siglos que estuvieron protagonizados por una sociedad sacralizada. Los temas tratados abarcan distintos aspectos que van desde análisis institucionales hasta realidades sociales y políticas, sin olvidar debates abiertos en la comunidad científica en los últimos tiempos. Con su habitual magisterio, el prof. Teófanes Egido nos dibuja las grandezas y miserias de la vida conventual, mientras que Arturo Morgado, con concienzuda minuciosidad, hace un balance de los estudios sobre el clero secular, aspecto que se completa, en cuanto a un sector de la jerarquía, con el análisis de los cabildos catedralicios por Rafael Marín. La tenebrosa Inquisición merece unas luminosas páginas sobre los orígenes de su historiografía por parte de Ricardo García Cárcel, mientras que Antonio Luis Cortés interviene en el debate abierto por las opiniones de Benzion Netanyahu sobre los orígenes de dicha institución.
Balance historiográfico y perspectivas Los trabajos sobre historiografía incluidos en este libro son el fruto de un seminario de investigadores especializados en el estudio de la Historia de la Iglesia, celebrado en la Universidad de Granada (mayo, 2006), con el fin de propiciar una revisión historiográfica de distintos ámbitos del conocimiento de la Iglesia y la sociedad española en los siglos XVI y XVIII. En dicha reunión se ha llegado a fructíferas conclusiones, recogidas en las colaboraciones incluidas en este volumen, que suponen un balance y una actualización de la historiografía sobre el tema, lo que sin duda alguna será un estímulo y una base tanto para la investigación como para la docencia universitaria, dado el rigor científico junto a la novedad de los planteamientos e interpretaciones aquí desarrollados, imprescindibles para el conocimiento de aquellos siglos que estuvieron protagonizados por una sociedad sacralizada. Los temas tratados abarcan distintos aspectos que van desde análisis institucionales hasta realidades sociales y políticas, sin olvidar debates abiertos en la comunidad científica en los últimos tiempos. Con su habitual magisterio, el prof. Teófanes Egido nos dibuja las grandezas y miserias de la vida conventual, mientras que Arturo Morgado, con concienzuda minuciosidad, hace un balance de los estudios sobre el clero secular, aspecto que se completa, en cuanto a un sector de la jerarquía, con el análisis de los cabildos catedralicios por Rafael Marín. La tenebrosa Inquisición merece unas luminosas páginas sobre los orígenes de su historiografía por parte de Ricardo García Cárcel, mientras que Antonio Luis Cortés interviene en el debate abierto por las opiniones de Benzion Netanyahu sobre los orígenes de dicha institución. En el tema de la economía de la Iglesia en España, nos ofrece con su reconocida competencia una visión muy sugestiva la profesora Ofelia Rey Castelao. Muy novedosas resultan las conclusiones de Julián Lozano Navarro sobre la Compañía de Jesús en relación con el poder político. Finalmente, Miguel Luis López-Guadalupe aborda el tema, siempre espinoso, de la jurisdicciones eclesiástica y civil en el ámbito de las hermandades y cofradías. Antonio Luis Cortés Peña, Profesor Titular de Historia Moderna de la Universidad de Granada, centra su labor investigadora en la historia social en la España moderna. Especialista en las relaciones Iglesia-Estado en el siglo XVIII español, ha contribuido al conocimiento de la historia de la Iglesia, sin olvidar otros muchos aspectos de la realidad social, como el mundo de la marginación, los grupos sociales, la mentalidad colectiva y, más recientemente, la conflictividad social. Sus contribuciones a la historia de Granada y a la historia de Andalucía son notables. Miguel Luis López-Guadalupe Muñoz, asimismo Profesor Titular de Historia Moderna de la Universidad de Granada, ha dedicado su investigación histórica a la religiosidad popular y a la Iglesia andaluza. Sus estudios sobre las cofradías granadinas han abierto vías de acceso a este sugestivo campo, desde la óptica de la historia de las mentalidades colectivas y desde la historia social. Ha investigado también las elites eclesiásticas, la realidad sanitaria bajo el Antiguo Régimen, la fiesta y los comportamientos sociales así como diversos aspectos de la historia de Granada